Portugal en furgo 5# Visitamos el palacio nacional de Mafra
- lapitufa van
- 11 may 2024
- 3 Min. de lectura
Llegamos a Mafra en plena navidad y visitamos su extravagante palacio nacional con mas de 1200 habitaciones, nos acercamos a una de las bibliotecas mas impresionantes de Portugal y a el bosque donde cazaba Dom Joao V, acompáñanos con lapitufavan
Donde pernoctar en Mafra
En esta ocasión, Mafra dispone de un área de autocaravanas y un parking muy cercano al palacio y al centro con una zona de vertido de agua grises y negras, donde también podemos rellenar de agua potable nuestra furgoneta.
Como añadido, esta al lado de una gasolinera si queremos repostar, el área esta nivelada pero el parking no, por lo que encontrar algo llano en época de mucha afluencia puede ser complicado. Ideal para pernoctar o simplemente aparcar para visitar Mafra. Además se puede llegar desde Lisboa mediante autobús con la compañía mafrense.
Palacio nacional de Mafra, la extravagancia de unión de palacio y monasterio
Que decir tiene que lo que mas llama la atención nada mas llegar a Mafra es su enorme palacio. No es para menos ya que ocupa nada mas y nada menos que 4 kilómetros cuadrados. Se derrocho mucho oro traído desde Brasil y se necesito a muchísimos artesanos, cerca de 45.000, para construir este enorme palacio.
La construcción fue iniciada en 1717 a cargo del maestro alemán Friedrich Ludwig por orden de Joao V, no escatimaron en gastos construyendo este palacio, inaugurándose unos años después en 1730.
Nunca fue residencia oficial de la realeza portuguesa pero si un lugar donde descansar y realizar jornadas de caza en los bosques que abundan por la zona. Poco les duro la alegría ya que en 1807 después de que los franceses invadieran Portugal, Joao VI tuvo que huir a Brasil llevándose consigo todo el rico mobiliario que abundaba en el palacio.
Dejando la historia del palacio a un lado, la visita es muy enriquecedora, primero nos acercan a ver la zona del monasterio con las pequeñas celdas de los franciscanos que aquí habitaban y su cocina llena de comodidades. Además en este área estaba el antiguo hospital del palacio, tal como vemos en la foto anterior.
Siguiendo con la visita pasamos por medio de la basílica a través de una enorme terraza desde donde oían los oficios religiosos la realeza portuguesa y así no tener que bajar para escuchar los santos oficios. Incluso donde podían asomarse a la enorme plaza que hay frente al palacio para dirigirse a la ciudadanía.
Sala de juegos y la sala de los trofeos de caza
Mas adelante entramos a las habitaciones privadas del palacio, donde lo que mas nos llama la atención es la sala de caza. Una enorme habitación llena de trofeos de caza y con extravagantes sillas y mesas que lo adornan, nos llamo mucho la atención la lampara que estaba colgada en el centro.
También podemos ver otras salas de juegos, con billares, tapetes y diferentes juegos de la época.
La joya del palacio, la biblioteca rococó
Como no, nos dejan lo mejor para el final. Una impresionante biblioteca de estilo rococó, con cerca 85 metros de largo coronada por una preciosa bóveda. Es una pena que no podamos recorrerla entera pero desde la entrada contemplamos su majestuosidad. La biblioteca guarda algo mas de 40.000 volúmenes, muchos de ellos encuadernados de forma manual por los propios monjes del monasterio.
Dando una vuelta por Mafra
Después de visitar el palacio, nos damos una pequeña vuelta gastronómica por el centro de la ciudad de Mafra, en navidad tiene unos puestos donde el licor de Ginja y el chocolate tienen un puesto garantizado, además hay bastantes artesanos. Lo que nos llamo mucho la atención son las chocolaterías y así terminamos nuestro día, metiéndonos un enorme crep a nuestro hambriento estomago.
Dejamos atrás Mafra y seguimos nuestra ruta por Portugal en furgoneta, ¡¡Hasta la próxima!!
Muy chuli, información super guay y muy util